Muy buenos días querida amiga,
Ha amanecido con un frio intenso, pero nada de esto me va a detener para seguir compartiendo contigo los tips que tengo para ti durante esta semana.
Si me has seguido seguramente ya leíste el primer tip de este artículo en serie, si aún no lo has leído de cualquier manera aquí puedes disfrutar del tip #1 en este enlace
El día de hoy vamos a hablar del tip #2 que espero que te sea de total utilidad, disfrútalo y déjame tu comentario. Gracias.
#2. Algunos hombres consideran que el romance es sólo una etapa de la relación, EDÚCALO:
Definitivamente estoy casi segura que sí le preguntará a 100 mujeres que cuentan con una relación amorosa larga acerca del nivel de romance en su relación amorosa, al menos un gran porcentaje me diría que ha bajado notablemente en relación con la etapa inicial de la relación. Y esto se convierte en una de las principales problemáticas y quejas más frecuentes por parte de las mujeres acerca de sus parejas. Yo incluida 😉
La verdad es que una relación amorosa cambia drásticamente conforme está madura, sin embargo, la madurez de la relación no tiene por qué estar peleada con el romance, sobre todo cuando este le da un toque maravilloso a la vida en pareja. Sin embargo, muchos hombres sino es la mayoría considera que el romance es sólo necesario durante una etapa de la relación y conforme pasa el tiempo y se sienten seguros de sus parejas, olvidan los detalles bonitos que para nosotras las mujeres son tan importantes.
Si bien es cierto que una relación madura y sobrevienen otros temas importantes que tienen que ser atendidos, el romance y el cuidado del amor dentro de la relación necesita también ser parte de los temas a atender todo el tiempo durante la vida en pareja.
No te quedes de manos cruzadas si tu pareja te dice que la etapa del romance ya paso y no necesita revivir parte de esto. Ya que, si te quedas conforme con esto, estás aceptando anular una parte importante de ti como mujer. Tampoco tomes la actitud de mantenerte en la queja constante y la crítica hacia tu pareja por su forma anti romance. Más bien elige educarlo para enseñarle que, aunque han madurado juntos y han pasado a otro nivel más profundo de la relación, los detalles, el romance y el amor de ambos siempre requerirá de cuidados.
Enséñale poco a poco predicando con el ejemplo, demuéstrale que para ti el romance no tiene por qué ser algo grandioso, requiere de pequeños detalles que tú misma puedes ir teniendo con él y enseñándole también a él a tenerlos contigo.
Dile que cosas valoras de él que no acostumbras a decirle, alaba cada pequeño esfuerzo que él hace para demostrarte que sigue enamorado de ti, trata también de entender el porqué de algunas de sus reacciones hacia cosas que antes eran perfectamente aceptadas sin problema.
Un abrazo en un momento idóneo, un beso o tomarse de las manos es algo romántico que muchas veces resulta incómodo para tu pareja cuando está en un modo distinto al modo romance que tú quieres vivir.
Habla acerca de lo que quieres, propone momentos para compartir
Dile que te explique en qué momentos es que considera imposible acceder a estos momentos románticos y en cuales sí pueden establecer ese espacio para vivirlos a plenitud.
Todo es cuestión de dialogo, acuerdos y entendimiento.
Ejemplo:
Hace algunos años una querida cliente me comentaba lo gracioso que le parecía con qué facilidad se hacían conclusiones erróneas cuando no se hablaba seriamente. Ella me contó que su esposo y ella tuvieron una discusión ya que cuando salían siempre estaban muy juntos, tomados de la mano y eran bastante melosos. Con el tiempo las cosas se fueron enfriando y cuando salían a hacer alguna compra o diligencia caminando, ella deseaba tomarle la mano y a él parecía incomodarle eso. Una vez le dijo que sentía que ya le molestaba tomarle de la mano, cosa que al principio nunca había sido de esa forma.
Después de platicar con él se dio cuenta que el problema no era que a él le molestará tomarla de la mano, sino que más bien los momentos que ella elegía para hacerlo no eran los indicados. La mayoría de las veces iban con prisa, el lugar no se prestaba para ir de esa forma, había mucha gente que impedía caminar con tranquilidad, o estaban en un lugar poco seguro que exigía prestar total atención a todo, etc. Todas estas cosas que hacían de un momento romántico “Tomarse las manos” se convirtiera en una situación difícil e incómoda. Eso era justamente lo que a él le molestaba en ese momento. Nada tenía que ver con que no deseará hacerlo.
Una vez que lo platicaron, logró darse cuenta de eso y de allí en adelante todo marcho más que bien entre ellos. Textualmente esto fue lo que ella me dijo: “Nos tomamos de la mano cuando elegimos salir a caminar, estamos en un parque, un lugar donde podemos caminar tranquilamente y no hay nada que interfiera en lo absoluto para disfrutar de ese momento. Y nuestro amor crece cada día reviviendo los detalles bonitos que considero necesarios, dándole a todo su tiempo”.
Querida lectora entonces te invito a educar a tu hombre, a enseñarle a mantener vivo el amor, siempre apelando al dialogo, a la comunicación directa que te ayude a entender los verdaderos motivos escondidos detrás de una actitud diferente a la de la etapa inicial de tu relación. No hagas conclusiones precipitadas, habla con amor y enseña a tu hombre a rescatar los momentos bonitos para mantener vivo el romance.
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