Aquí comparto una foto de mi matrimonio 1 mes y medio después de que nos vimos cara a cara por primera vez. Testimonio perfecto de que el amor aunque sea dificil es posible y se manifiesta, te enseño a lograrlo con mi fórmula para atraer el amor.
Algo maravilloso en mi vida fue el finalmente alcanzar el amor que tanto soñaba y de una manera que parecía imposible hace 15 años.
Y es que apenas estaba empezando el bum del internet y fue de esa manera que yo conocí al que hoy en día es mi esposo. Nunca imaginé que así sería, de hecho ni siquiera llegue a suponer que saldría de mi país natal (Colombia) para compartir mi vida al lado de mi amor soñado. La verdad es que yo era una chica muy apegada a mis raíces, a mis amigos, a mi forma de ser, a mis padres a mi familia, me veía estudiando una carrera en mi pequeña ciudad y tampoco pensaba muy en serio el hecho de irme a otra ciudad para estudiar lejos de casa como si lo hizo mi hermano, pues mi relación con mi madre era muy cercana y una parte de mí no quería perder eso, y dejar la zona cómoda que me hacía sentir a gusto. Sin embargo cuando el universo tiene las respuestas las cosas se dan más fácil de lo que crees, y no tienes que esforzarte mucho sobre todo si estas alineado con las vibraciones de felicidad y claridad que necesitas para que ese sueño se manifieste. Y conocí a mi esposo en una sala de chat por internet, para mí era un hobbies agradable el conocer gente por este medio, más nunca había sido algo realmente serio como para creerme que podría llegar a conocer a una persona fuera de mi país, mi mente en ese momento no llegaba tan lejos y sin darme cuenta me fui enamorando de él cada vez que lo conocía mejor en nuestras largas conversaciones, él era esa persona a la que podía contarle todo lo que me estaba pasando en ese momento, y yo era para él esa persona que podía escucharlo sin juzgarlo por lo que vivía en su presente. Cuando menos pensé, estaba completamente metida en esa relación, no quería hacer otra cosa diferente a estar allí para conversar con él y saber de su día, y compartir a su vez lo que me había sucedido, el me llenaba y las horas de espera para nuestra cita eran largas, deje de interesarme por mis salidas de viernes, mis amigos y pretendientes que me invitaban un café, salir o pasear. Mi mami estaba seriamente preocupada por mi actitud, pero mi corazón que sufría y a la vez era feliz, sentía que eso era lo que en realidad quería estar viviendo en el momento.
Y digo sufría porque al sentirme enamorada de alguien que estaba a miles de kilómetros de lejanía porque ese amor vivía en México, me hacía sentir que estaba loca al pensar que una historia de amor entre los dos podría ser real, sobretodo porque yo no tenía dinero para pensar en un viaje y todos los gastos que ello implicaba y el al igual que yo era un simple estudiante que no contaba con dinero para poder encontrarnos y estar juntos, sin embargo yo seguí soñando con ese amor, seguí imaginando que encontraría al ser perfecto para mí y mi corazón pedía a gritos que fuera él, paso un tiempo para que las cosas se dieran, y en ese tiempo encontré la manera de alinearme con el amor, de hacer que mis vibraciones salieran del sufrimiento de pensar en imposibles y se convirtieran en una sensación de confianza y certeza de que ese amor se haría posible, sin saber cómo, ni cuando, comencé a creer que así seria, me obligaba a cambiar mi actitud derrotista cuando me dominaba la tristeza y la incredulidad de que pasaría algo maravilloso que nos permitiría unirnos, conocí personas que fueron guías para mí en el camino, que me enseñaron claves que puse a trabajar a mi favor, y entonces el amor comenzó a mostrar las posibilidades, la gente me creía loca, mi madre incluso me hizo cita con un psicólogo que cuando lo ví resulto psiquiatra jajajaja y quiso al igual que todos sacarme de mi idea de amarlo de lejos, prescribió para mi pastillas para sentirme feliz es obvio que nunca las tome, me dijo también que buscara un chico en mi ciudad y me permitiera conocerlo para que encontrara ese amor que buscaba pero que fuera posible, todos sus comentarios terminaron por contrariarme, nadie me iba a decir cuando, como y donde quitarme de la mente el amor que sentía, solo Dios sabía si él era para mí, y no iba a permitir que a aquellos que me veían extraño por actuar diferente intentaran cambiar mi mente y mis sentimientos como si fuera basura lo que sentía. Así, decidí no volver con el terapeuta, y seguí con mis recursos, mis libros, y soñando, soñando con mi corazón entero para él, y finalmente se dieron las cosas, llego el día de conocerlo…
Había muchas preguntas en el tintero,
¿Sería igual que como era en el chat?
¿Haríamos química?
¿Se sentiría atraído por mí de la misma forma en que me vio en foto?
¿Lo sentiría yo?
¿Estaríamos juntos para siempre?
¿Qué pasaría en el momento que nos viéramos por primera vez?
¿Me sentiría como si ya lo conociera o tendríamos que empezar como dos desconocidos?
¿Cómo se tejería la historia entre nosotros a partir de ese momento?
Todas estas respuestas vinieron después, junto con un nuevo comienzo, todo esto lo cuento en detalle, junto con cada uno de los pasos que desarrolle personalmente con la fórmula de 4 pasos que puse a trabajar y que me permitieron vivir la vida amorosa maravillosa que hoy vivo, conoce los detalles en mi programa Formula de 4 pasos para manifestar el amor aquí